
Me he sentido identificado con el chico de esta historieta, ya que cuando, por ejemplo, una película te gusta tanto que tu fanatismo te pide salir a gritos te puede pasar lo que al niño de la viñeta. Yo confieso que en su momento me pasó con 'Matrix'. Una película así te pilla en una época de tu vida en la que luchas por encontrar tu verdadero yo y pasa lo que pasa. Por un momento dudas de si el mundo en el que vives no es más que un puto programa de ordenador, o que todo es un sueño, como en 'Origen', o que se yo.
En fin, que más allá de lo cómica que pueda resultar la viñeta (que lo es) su mensaje es bastante inspirador y más que reír puede hacerte reflexionar (o llevarte a divagaciones sin rumbo ni sentido ninguno, como en mi caso).
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