Estuve a punto de dejar la ciudad sin visitar el United Center (estadio que comparten los Chicago Bulls y los Chicago Blackhawks, el equipo de hockey sobre hielo de la ciudad) si no llega a ser porque un amigo de Sevilla me dijo que no dejara pasar la oportunidad. Pues bien, así hicimos (una vez más sintiéndome que obligaba al resto de la gente a hacer algo que les era indiferente) y la verdad es que acabé alegrándome bastante.
Sinceramente, el monumento a Jordan es una de las esculturas más impresionantes que he visto en mi vida, y no exagero. Tanto por el nivel de detalle (pocas veces he visto uno similar) porque es que se aprecian hasta las venas de las piernas como por la composición del conjunto.
En la escultura vemos a Jordan en su clásica postura a la hora de realizar mates que le hizo ganarse el apodo 'Air Jordan' y cuya silueta fue el logo de una línea de productos de Nike. Todo esto es muy espectacular pero me quedo, sin duda, con el detalle de cómo están representados los adversarios que intentan blocarle. Estos oponentes están representados como desvaneciéndose, reflejando perfectamente la superioridad de Jordan sobre sus rivales. Y así reza la base de la escultura: El mejor que hubo nunca. El mejor que habrá jamás. Y razón no le falta.
Bueno, muy bonito todo pero, ¿tiene algo que ver esto con la cultura pop o los temas que tratamos en este blog? Pues permitidme deciros que sí. El United Center fue una de las localizaciones que se utilizaron en la película Space Jam y si ya el monumento a Michael Jordan es razón suficiente para visitar este estadio ese otro detalle fue el dato decisivo que me hizo desplazarme hasta allí. Chicago me ha sorprendido a tantos niveles...
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